TAMAÑO DEL UNIVERSO (V)

Siguiendo con la exigencia de obtener el paralaje para determinar la distancia de algunas de las estrellas mas próximas. Fue entre los años de 1830-1839, cuando se acometió con precisión este problema por parte de tres astrónomos que trabajaron independientemente, Besse, Henderson y Struve, los más llegaron a la conclusión de que las estrellas del sistema Alpha Centauri, las mas cercanas a nosotros, se situaban a 4,29 años luz. (El año-luz es la distancia que la luz recorre en un año y equivale a unos 10 billones de kilómetros).
También se determinaron las distancias  a 61 Cygni y a Vega, resultando ser estas de 11,1 y 27 años-luz respectivamente  Con estos datos ya no cabía duda que el sistema solar se encontraba aislado en medio un vació gigantesco.
Una vez determinadas las distancias reales entre el Sol y algunas de las estrellas más próximas, se pudo comparar sus luminosidades, llegándose a la conclusión de que el Sol, el objeto más fantástico del cielo era solo una simple estrella, y de las más corrientes, habiendo otras muchas  miles de veces más luminosas.
Cumulo globular M13 en la constelación de Hércules
Resuelto el problema de la distancia a las estrellas más cercanas, la siguiente cuestión inevitable era preguntarse acerca de a que distancia se encontrarían las más lejanas.
A simple vista se pueden observar unas 6.000 estrellas y teniendo en cuenta la distancia promedio a que pueden estar seraparadas, todas ellas podían estar contenidas en un mundo de 330 años-luz de diámetro. Pero las estrellas no son 6.000, y desde que Galileo miro al Cielo con su telescopio, ya pudo ver muchas estrellas que a simple vista pasaban inadvertidas. Y cada vez que el instrumento se perfeccionaba, aparecían nuevos conglomerados, sin vislumbrarse por el momento un posible fin, en un Universo infinito carente de fronteras.

Pero esta idea repugna a la razón humana. El astrónomo Willian Herschel comenzó a trabajar con la hipótesis de que el numero de estrellas fuese finito y  a lo ancho de un espacio también finito.
En primer lugar constato que la distribución de las estrellas en el cielo no es uniforme. Desde la Tierra podemos observar, en noches sin luna y fuera de interferencias luminosas artificiales, que a lo largo de todo el cielo se extiende una banda de suave luminosidad, que corta el plano ecuatorial de la Tierra con un ángulo de 62º. Los griegos ya la conocían y los romanos la llamaron "Vía Láctea". Ya Galileo observó que esta banda lechosa, no era otra cosa que un ingente numero de estrellas muy tenues, poniendo en evidencia, que en la dirección de la Vía Láctea hay un mayor numero de estrellas que en otras direcciones. Herschel sabia esto, pero ademas se dedico a estudiar sistemáticamente, como variaba la abundancia de estrellas de un lugar a otro, constatando que número aumentaba continuamente en la dirección a la Vía Láctea, alcanzando un máximo en el plano de esta, y pasando por un mínimo en la dirección perpendicular a dicho plano.
Herschel saco de todo esto la conclusión de que las estrellas se distribuyen uniformemente en un volumen de espacio en forma de lente, y que nuestro Sol se encuentra cerca del centro de este sistema. Al mirar en la dirección del plano de la lente, veríamos algunas estrellas brillantes cerca de nosotros, detrás una gran masa de estrellas más distantes y por tanto más tenues, y detrás, estrellas aún más lejanas y más oscuras. Estas últimas ya seriamos incapaces de discernirlas por separado, pero en su conjunto le darían al cielo una pálida luminosidad que sería la Vía Láctea. Además parecía logico suponer que el Sol ocupara el centro de la galaxia, teniendo en cuenta que la Vía Láctea da la sensación de rodear el cielo por completo y de un brillo uniforme.
Proximamente continuaremos nuestro viaje a través del tiempo y el Universo.