1. El inicio de la primavera
La primavera de 2018 comenzará el 20 de marzo a las 17h 15m
hora oficial peninsular, según cálculos del (Instituto Geográfico Nacional -
Ministerio de Fomento). Esta estación durará 92 días y 18 horas, y terminará el
21 de junio con el comienzo del verano.
Los inicios de las estaciones se definen como aquellos
instantes en los que la Tierra se encuentra en una determinada posición en su
órbita alrededor del Sol. En el caso de la primavera, esta posición es en la
que el centro del Sol, visto desde la Tierra, cruza el ecuador celeste en su
movimiento aparente hacia el norte. Cuando esto sucede, la duración del día y
la noche prácticamente coinciden y, por eso, a esta circunstancia se la llama
también equinoccio de primavera. En el momento en que en el hemisferio norte
empieza la primavera, en el hemisferio sur comienza el otoño.
Alargamiento del día.
El inicio de la primavera es la época del año en que la longitud
del día se alarga más rápidamente. A las latitudes de la península, el Sol sale
por las mañanas más de un minuto antes que el día anterior, y por la tarde se
pone más de un minuto después. Como consecuencia, al inicio de la primavera, el
tiempo en que el Sol está por encima del horizonte aumenta casi tres minutos
cada día.
Actividad solar.
La actividad del Sol se caracteriza por la presencia en su
superficie de manchas, fulguraciones y protuberancias, y en la Tierra, se
aprecia en alteraciones en la propagación de las ondas de radio y en una mayor
presencia de auroras polares. Esta actividad sigue un periodo de
aproximadamente 11 años, y está asociada al ciclo magnético del Sol.
Actualmente nos encontramos en el ciclo solar número 24 que comenzó en diciembre
de 2008 y alcanzó su máximo durante la primavera del año 2014. Según las
estimaciones realizadas por NOAA y Space Weather Prediction Center, durante la
primavera el número de manchas solares seguirá decreciendo alcanzando valores
entre 3 y 24.
2. Eclipses
Durante la primavera de 2018 no se producirán eclipses de
Sol o de Luna.
3. Observación nocturna del cielo en primavera
Visibilidad de los
planetas.
Durante toda la primavera, Venus será visible después de la
puesta de Sol, y Marte y Saturno serán visibles al amanecer. Júpiter también
será visible al amanecer al comienzo de la estación, pasando a ser visible toda
la noche en el mes de mayo.
Fases de la Luna.
La primera luna llena de la primavera se dará el 31 de
marzo, siendo el domingo siguiente (1 de abril) el Domingo de Pascua. Las
siguientes lunas llenas serán el 30 de abril y el 29 de mayo. Las lunas nuevas
de la primavera sucederán los días 16 de abril, 15 de mayo, y 13 de junio.
Lluvias de meteoros.
La principales lluvias de meteoros durante la primavera
serán las Líridas, con un máximo hacia el 22 de abril, y las Eta Acuáridas,
cuyo máximo sucederá hacia el 6 de mayo.
Constelaciones.
La primavera es un buen momento para observar el cielo, pues
las noches todavía son largas y hace menos frio que en invierno. Una de las
constelaciones más características de la primavera es Leo, fácil de localizar
hacia el sur tras la puesta de Sol por su forma de signo de interrogación
invertido. Mirando hacia el norte de Leo, encontramos la también fácilmente
reconocible Osa Mayor. Hacia el este de Leo, destacan las constelaciones de
Virgo y del Boyero, cada una con una estrella brillante: Spica en Virgo y
Arturo en el Boyero. El triángulo formado por estas dos estrellas y por Régulo
en Leo se denomina triángulo de la primavera, y su localización en el cielo
proporciona un buen punto de partida para empezar a explorar el resto de las
constelaciones visibles durante la estación.
4. Cambio de hora
Como es habitual, el horario de verano comienza el último
domingo de marzo. A las 2 de la madrugada hora peninsular del domingo 25 de
marzo adelantaremos el reloj hasta las 3 (la 1 de la madrugada en Canarias
pasará a ser las 2). Ese día por tanto tendrá oficialmente una hora menos.
Fuente: Instituto Geográfico Nacional - Ministerio de
Fomento