Información proporcionada por el Observatorio Astronómico Nacional (IGN, Ministerio de Fomento). |
1.-El inicio del verano
El verano de
2019 comenzará el 21 de junio a las 17 horas y 54 minutos hora oficial
peninsular, según cálculos del Observatorio Astronómico Nacional (Instituto
Geográfico Nacional - Ministerio de Fomento). Esta estación durará 93 días y 15
horas, y terminará el 23 de septiembre con el comienzo del otoño.
Al comienzo
del verano, Saturno será visible durante toda la noche, pasando ser visible al
anochecer junto a Júpiter y, hasta mediados de julio, Marte. Al amanecer Venus,
acompañado de Saturno, será visible hasta mediados del mes de julio. El día 2
de julio tendrá lugar un eclipse total de Sol que será visible en el Pacífico
sur y Sudamérica. La noche del 16 al 17 de julio tendrá lugar un eclipse
parcial de Luna que será visible desde España.
Saturno- Fotografía Agrupación Astronómica Perseo |
El inicio de
las estaciones viene dado, por convenio, por aquellos instantes en que la
Tierra se encuentra en unas determinadas posiciones en su órbita alrededor del
Sol. En el caso del verano, esta posición se da en el punto de la eclíptica en
el que el Sol alcanza su posición más boreal. El día en que esto sucede, el Sol
alcanza su máxima declinación Norte (+23º 27') y durante varios días su altura
máxima al mediodía no cambia. A esta circunstancia se la llama también
solsticio (“Sol quieto”) de verano. En este instante, en el hemisferio sur se
inicia el invierno.
El día del
solsticio de verano corresponde al de más horas de luz del año. Alrededor de
esta fecha se encuentran el día en que el Sol sale más pronto y aquél en que se
pone más tarde. Un hecho circunstancial no relacionado con el inicio de las
estaciones se da también en esta época: el día del afelio, es decir, el día en
que el Sol y la Tierra están más alejados entre sí a lo largo del año. Es este
mayor alejamiento al Sol la causa de que la Tierra se mueva más lentamente a lo
largo de su órbita elíptica durante el verano (según la conocida como segunda
ley de Kepler) y por lo tanto esta estación sea la de mayor duración.
Fechas posibles de inicio del verano. El inicio del verano puede darse, a
lo sumo, en tres fechas distintas del calendario (del 20 al 22 de junio). A lo
largo del siglo XXI el invierno se iniciará en los días 20 y 21 de junio (fecha
oficial española), siendo su inicio más tempranero el del año 2096 y el inicio
más tardío el de 2003. Las variaciones de un año a otro son debidas al modo en
que encaja la secuencia de años según el calendario (unos bisiestos, otros no)
con la duración de cada órbita de la Tierra alrededor del Sol (duración
conocida como año trópico).
Duración del día. Si llamamos coloquialmente duración
del día al tiempo que transcurre entre la salida y la puesta del Sol en un
lugar dado, el próximo día 21 de junio va a ser el día de mayor duración. Como
ejemplo, en Madrid esta duración será de 15 horas y 3 minutos, a comparar con
las 9 horas y 17 minutos que durará el día más corto (que el año 2019 será el
22 de diciembre). Obsérvese que hay casi seis horas de diferencia entre el día
más corto y el más largo. Esta diferencia depende mucho de la latitud del lugar,
siendo nula en el ecuador y siendo extrema (24 horas) entre los círculos
polares y los polos. Precisamente es por encima del círculo polar boreal donde
algunos días al año alrededor del 21 de junio se da el fenómeno del Sol de
medianoche, en que el Sol es visible por encima del horizonte durante las 24
horas del día.
Salida y puesta del Sol. Se podría pensar que el día más
largo del año será también el día en que el Sol salga más pronto y se ponga más
tarde; pero no es así: esto es debido a que la órbita de la Tierra alrededor
del Sol no es circular sino elíptica, y a que el eje de la Tierra está
inclinado en una dirección que nada tiene que ver con el eje de dicha elipse.
Ello también hace que un reloj solar y nuestros relojes, basados en un Sol
ficticio, estén desajustados. El día en que el Sol saldrá más pronto será el 15
de junio, mientras que el día en que el Sol se pondrá más tarde será el 28 de
junio.
Distancia al Sol. Por estas fechas se da también el
máximo alejamiento anual (afelio) entre la Tierra y el Sol. En esta ocasión, el
máximo alejamiento se dará el día 5 de julio, siendo la distancia de algo más
de 152 millones de km, unos 5 millones de km más que en el momento de perihelio
o de menor distancia (3 de enero de 2019).
Actividad solar. La actividad del Sol se caracteriza
por la presencia en su superficie de manchas, fulguraciones y protuberancias, y
en la Tierra, se aprecia en alteraciones en la propagación de las ondas de
radio y en una mayor presencia de auroras polares. Esta actividad sigue un
periodo de aproximadamente 11 años, y está asociada al ciclo magnético del Sol.
Actualmente nos encontramos en el ciclo solar número 24 que comenzó en
diciembre de 2008 y alcanzó su máximo durante la primavera del año 2014. Según
las estimaciones realizadas por NOAA y Space Weather Prediction Center, durante
el verano el número de manchas solares seguirá decreciendo alcanzando valores
entre 0 y 16. Gráficas con el número de manchas solares en los últimos años y
predicciones de la evolución del ciclo 24 pueden encontrarse en: http://www.swpc.noaa.gov/products/solar-cycle-progression
2. Eclipses y fenómenos relacionados
El día 2 de
julio habrá un eclipse total de Sol que será visible como parcial en el
Pacífico sur y Sudamérica. La franja de totalidad será visible en algunas zonas
de Argentina y Chile. Más información en:
http://astronomia.ign.es/rknowsys-theme/images/webAstro/paginas/documentos/pdf/2019jul02.pdf
La noche del 16 al 17 de julio tendrá lugar un eclipse parcial de Luna que será
visible en Sudamérica, Europa, África, Asia y Oceanía. Este eclipse será visible
en España. Más información en:
La noche del 16 al 17 de julio tendrá lugar un
eclipse parcial de Luna que será visible en Sudamérica, Europa, África, Asia y
Oceanía. Este eclipse será visible en España. Más información en:
3. Observación
nocturna del cielo en verano
En toda
época del año hay algún fenómeno astronómico de interés, predicho (como son los
eclipses) o no (como los cometas nuevos). Suele ser preferible realizar las
observaciones en fechas cercanas a la luna nueva (2 julio, 1 y 30 de agosto),
salvo cuando se pretende observar la propia Luna.
Fases de la Luna |
Luna llena. La primera luna llena del verano se
dará el 16 de julio, dándose las siguientes 29 o 30 días después. En este
verano se darán otras dos lunas llenas: 15 de agosto y 14 de septiembre.
Visibilidad de los planetas. Al comienzo del verano, el cielo al
amanecer estará dominado por Venus, que dejará de ser visible a mediados del
mes de julio, y por Saturno, que será visible toda la noche al principio de la
estación, pasando a ser visible al anochecer junto a Júpiter y, hasta mediados
de julio, Marte.
Lluvia de meteoros |
Lluvias
de meteoros. Si no se dispone de ningún telescopio, se pueden observar las
lluvias de meteoros que se producen ocasionalmente. Las dos lluvias de meteoros
más importantes del verano serán las delta acuáridas, con un máximo hacia el 30
de julio, y las populares perséidas, cuyo máximo sucederá hacia el 12 de
agosto. En el año 2019 la Luna, que será llena el 15 de agosto, dificultará la
observación de las perséidas en los días de su mayor actividad.
Constelaciones. En cuanto a las agrupaciones
ficticias de estrellas conocidas como constelaciones, posiblemente el verano es
la época del año en la que más miradas se dirigen hacia el cielo, destacando la
espectacular franja blanquecina que forma la Vía Láctea. Nada más caer la
noche, comienzan a aparecer las estrellas más brillantes y es facilmente
identificable el triángulo formado por Altair de la constelación del Águila,
Deneb de la constelación del Cisne y Vega de la constelación de la Lira. Es el
denominado triángulo de verano. Alrededor de la estrella Polar, se verán a lo
largo de la noche las constelaciones de Casiopea, Cefeo, el Cisne, el Dragón y
las dos Osas. También serán visibles de Este a Oeste, Pegaso, el Aguila, la
Coronal Boreal y la Cabellera de Berenice. Cerca del horizonte podremos
observar a lo largo de la noche algunas de las constelaciones zodiacales, de la
Virgen a Acuario, esta última ya casi al amanecer.
Telescopio de la Agrupación Astronómica Perseo |
Observaciones con prismáticos o
pequeños telescopios. Con grandes prismáticos o un pequeño telescopio, dotados de un filtro
lunar adecuado, se puede observar el relieve de la Luna. Para tener una buena
visión de él conviene ir observándolo noche tras noche mientras va creciendo la
iluminación de la Luna, pues así se ven aparecer nuevos accidentes orográficos.
Cuando la noche es más oscura por haber luna nueva, se puede intentar ver
nebulosas de emisión como el complejo de nebulosas de Orión (Messier 42 y 43),
el grupo de las estrellas Pléyades y el resto de supernova conocido como la
nebulosa del Cangrejo (Messier 1). Con prismáticos también se pueden ver las
lunas más brillantes de Júpiter y se puede hacer un recorrido por la franja
estrellada que constituye la Vía Láctea.
Fuente: Información proporcionada por el Observatorio Astronómico Nacional (IGN, Ministerio de Fomento).